En el proceso del tratamiento de aguas servidas, la primera etapa es la depuración. Esta consiste en someter a dichas aguas a un pretratamiento mecánico que implica la eliminación de los sólidos, arenas y grasas. La planta de pretratamiento compacta o PPTC permite depurar el agua de los contaminantes antes descritos con una eficiencia de sobre el 90%. Básicamente la PPTC está compuesta por una zona de tamiz, donde se realiza la retención de sólidos; una zona de decantación y extracción de arena; y una zona de extracción de grasas. Cada una de estas zonas están conformadas por equipos diseñados para alcanzar el objetivo predestinado de la forma más eficiente posible.